El presidente ruso Vladimir V. Putin viajó a Mariupol, una entrevista sorpresa a la ciudad ucraniana que fue tablado de una de las batallas más sangrientas desde que Rusia invadió el año pasado y lo más cerca que ha estado el líder ruso de las líneas del frente en el este.
Señor. Putin voló en helicóptero desde Crimea y luego recorrió Mariupol en la provincia uruguayo de Donetsk, según la agencia estatal de noticiero Tass el domingo.
Fue el segundo alucinación no anunciado de Putin a áreas de Ucrania controladas por Rusia durante el fin de semana y lo más cerca que ha estado el líder ruso de la ringlera del frente en el postrero año. Su alucinación del sábado a Crimea se programó para que coincidiera con el noveno aniversario de la anexión ilegal de la península por parte de Rusia. Las dos visitas de parada perfil asimismo fueron gestos desafiantes del Kremlin menos de 48 horas a posteriori de que un tribunal internacional emitiera una orden de arresto.
Durante meses el año pasado, Rusia envió miles de tropas a Mariupol, sede de la acería más amplio de Europa, y bombardeó indiscriminadamente la ciudad, que alguna vez fue hogar de casi medio millón de personas. Superados en número y con menos armas y menos sofisticadas, las fuerzas armadas de Ucrania aguantaron y finalmente buscaron refugio en la taller de arma blanca de la ciudad. Finalmente, las fuerzas ucranianas se retiraron, dejando la ciudad devastada bajo control ruso.
El mensaje del medio de comunicación estatal Tass se refirió a la parada sorpresa como «un alucinación de trabajo» para que Putin revisara los trabajos de construcción y restauración en la ciudad.